La cantante británica Amy Winehouse se ha librado por los pelos de ingresar en prisión. La joven, detenida el viernes cuando fue a declarar voluntariamente por una denuncia por agresión a dos hombres, fue puesta en libertad ayer tras pasar una noche en una celda de la comisaría de Holborn.Según fuentes policiales, la polémica intérprete "cooperó plenamente" con la investigación y, además de "disculparse por el incidente", agradeció a la policía su "profesionalidad" y aseguró que no provocará más altercados en el futuro. La policía ha advertido a la artista que, de momento, no presentará acusación contra ella, pero le ha informado de que el suceso quedará registrado y se tendrá en cuenta en el futuro si se presentan nuevos cargos en su contra por un caso similar.Winehouse está recibiendo muchas presiones desde su entorno familiar y artístico para que abandone las drogas, que no solo la están destruyendo físicamente sino que van a acabar con su brillante carrera como cantante de soul. Universal Music ha amenazado con no renovarle su contrato si continúa su mal comportamiento y sus adicciones.La cantante tiene previsto participar en la nueva película de James Bond, Quantum of Solace, protagonizada por Daniel Craig, donde interpretará el tema principal.
